El reconocido cantante Jesús Adrián Romero ha vuelto a generar controversia en sus redes sociales. En esta ocasión, hizo unas declaraciones que muchos consideran totalmente contrarias a la Biblia. En su cuenta de Twitter, publicó lo siguiente: «Todo se resume en amarte a ti, amar a tu prójimo y amar a Dios, en ese orden. Porque no podemos amar lo que no vemos sin amar primero lo que vemos».

Esta publicación del cantante ha generado numerosas respuestas negativas. Al leer detenidamente el tweet, se puede notar que el cantante está invirtiendo el orden que la Biblia establece. En su publicación, afirma que lo primero es amarse a uno mismo, luego amar al prójimo y en tercer lugar está amar a Dios. En otras palabras, el tweet de Jesús Adrián Romero deja la idea de que para las personas llegar a amar a Dios primero deben pasar por dos etapas en cuanto al afecto: amarse a uno mismo y amar a otro.

Por esta razón, en diversos comentarios, algunos le hicieron saber al cantante que estaba invirtiendo el orden. Un usuario le respondió: «Jesús Adrián, amar a Dios no puede nunca estar en tercer lugar, como dices». Y en su respuesta, agregó una imagen del pasaje bíblico donde el mismo Jesús establece el orden de las relaciones: «Ama al Señor tu Dios con todo tu corazón, con todo tu ser y con toda tu mente», le respondió Jesús. «Este es el primero y el más importante de los mandamientos. El segundo se parece a este: Ama a tu prójimo como a ti mismo».

Al comparar el orden que se inventó Jesús Adrián Romero con el orden que Jesús establece, se pueden notar diferencias. En el orden de Cristo, amar a Dios está primero. Sin embargo, el cantante se detuvo a responder el comentario que le hizo esa persona y escribió lo siguiente: «Hola Lucas, entiendo tu punto, pero si Dios es amor, él no está en tercer lugar ni en el primero, está en todo lugar, en el amor a mí mismo, el amor al prójimo».

Fue el mismo Jesús quien dijo: «Si vienes al altar a demostrar tu amor a mí a través de tu ofrenda y te acuerdas que tu hermano tiene algo contra ti, ve primero y arregla ese problema. Es más importante mi hermano que Dios». Por supuesto que no, para Dios no hay distinción de importancia, excepto la importancia de amar.

En la respuesta de Jesús Adrián Romero, una vez más afirma lo que dijo en la publicación, pero esta vez, en lugar de aclarar, parece que hace una declaración más confusa o peor que la primera. En sus propias palabras, afirma que Dios no hace ninguna distinción o importancia en el orden de amar. Sin embargo, en la Biblia claramente sí hay un orden que el mismo Cristo establece, y es amar a Dios primero y luego nos demanda amar a los demás.

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